Cuando te invada la tristeza mírate en el espejo y di en voz alta "Ja,ja,ja". Con este pequeño gesto puede que lo absurdo de la situación te saque una sonrisa y además estás enviando información a tu cuerpo para que cambie el estado de ánimo.
Para el ser humano, el
yin yáng y las 4 estaciones son la raíz y el origen de todas las cosas. Por
ello, las personas sabias nutren su yáng en primavera y verano y su yin en otoño
e invierno.
¿Quieres trabajar tu
cuerpo y emociones para que el cambio de estación sea favorable?
El dispositivo
cuántico armoniza con sus frecuencias, el pulmón e intestino
grueso, así como los meridianos correspondientes.
El período de los 3
meses de otoño se llama “apariencia igualada”. Conviene acostarse temprano y
levantarse temprano con el canto del gallo con voluntad de sosiego y
tranquilidad. Si se actúa contrariamente, se lesionará el pulmón, esto se llama
“escasa entrega a almacenar”.
El pulmón es la raíz de
la respiración del ser humano, es la morada del alma sensitiva. Su esplendor se
refleja en el vello corporal, su función es enriquecer la piel.
Su orificio es la nariz. El fluido que produce son las lágrimas. Cuando
el pulmón enferma se localiza en la espalda.
Su enfermedad se manifiesta en la piel y el pelo. Su olor es a
pescado.
La emoción asociada es
la tristeza (la alegría triunfa sobre la tristeza). El sonido es el llanto.
Su expresión alterada es la tos.
El color blanco y
el sabor picante conviene al pulmón.
Pertenece al elemento metal.
Cita: mjgarbor@gmail.com / 605457682